1 de agosto: Día Nacional del ARN
Celebramos una molécula esencial para la vida y un orgullo de la ciencia argentina
El 1 de agosto se conmemora en Argentina el Día Nacional del ARN, en homenaje al trabajo pionero de investigadores argentinos en el campo de la biología molecular. Una oportunidad para visibilizar la importancia de esta molécula clave en nuestras células y su impacto en la ciencia y la salud.
Cada 1 de agosto, en Argentina celebramos el Día Nacional del ARN (ácido ribonucleico). La fecha fue elegida en honor al primer artículo científico argentino que describió el fenómeno del splicing alternativo del ARN mensajero, publicado el 1 de agosto de 1986 por el equipo del Dr. Alberto Kornblihtt, destacado investigador del CONICET y referente internacional en biología molecular.
Pero, ¿por qué una molécula como el ARN merece su propio día?
Porque el ARN es fundamental para la vida: es quien toma la información del ADN y la traduce para que nuestras células puedan producir proteínas. Sin ARN, nuestras células no podrían funcionar. Además, hoy sabemos que hay muchos tipos de ARN, cada uno con funciones específicas: algunos actúan como mensajeros, otros como reguladores, y algunos incluso como defensores frente a virus.
En los últimos años, el ARN también fue protagonista en el desarrollo de nuevas tecnologías biomédicas. Las vacunas contra el COVID-19 basadas en ARN mensajero demostraron su eficacia y marcaron un antes y un después en la medicina moderna.
En el IHEM, el estudio del ARN forma parte de diversas líneas de investigación que buscan comprender cómo funciona el cuerpo humano, cómo se originan ciertas enfermedades y cómo podemos intervenir para prevenirlas o tratarlas. Celebrar el Día Nacional del ARN es también celebrar el conocimiento, la dedicación y el trabajo cotidiano de científicos y científicas que, desde Argentina, contribuyen al avance de la ciencia a nivel mundial.
🧠 ¿Qué es el ARN?
El ARN (ácido ribonucleico) es una molécula presente en todas las células y cumple funciones vitales:
- ARN mensajero (ARNm): transporta la información genética del ADN para fabricar proteínas.
- ARN de transferencia y ribosómico: ayudan en el proceso de traducción de esa información.
- ARNs reguladores: controlan qué genes se activan o se silencian.
Es una pieza clave en el funcionamiento celular, en el desarrollo de organismos y en la respuesta frente a enfermedades.